La mayoría de nosotros vámos por la vida buscando respuestas a los tantos acontecimientos que nos ocurren y la verdad, ¿Díganme si no es cierto?......También, la mayoría de las veces nosotros mismos conocemos la respuesta a cada una de esas inquietudes. ¿Por qué en mi trabajo no me reconocen? ¿Por qué mi familia no me comprende? ¿Por qué mis proyectos no resultan? ¿Por qué mis hijos no valoran el esfuerzo que hago? ¿Por qué mi mujer o mi esposo; no me ayuda?....Y más preguntas que podría enlistar y que quizas no me alcanzaría este espacio para escribirlas. Pero seamos sinceros, ¿Cuántas de todas estas veces nosotros mismos conocemos la respuesta? Y despues de asumir que somos los únicos responsables de poder cambiar, revertímos el efecto de la causa y seguimos igual. Luego, en la primera situación repetitiva por cierto; volvemos a cuestionarnos, a respondernos y asi seguimos. Y así lo hemos hecho por muchos años. Cuantos, no lo sé; éso lo sabemos cada uno de los que estámos leyendo este segmento. Y saben ¿Por qué?.... Porque los seres humanos somos seres de hábitos, de costumbres y todo lo queremos hacer porque siempre ha sido así, porque nuestros abuelos así lo hicieron, porque mis padres se aguantaron, porque mi supervisor así lo hacía y demás excusas que nos inventamos para no asumir la única y verdadera realidad: "NOSOTROS SOMOS LOS UNICOS RESPONSABLES DE LO QUE NOS SUCEDE". Conocemos las respuestas, sabemos qué se debe hacer; pero casi siempre nos falta el valor de iniciar el cambio; nos consume la rutina de todos los dias, de la misma situación, de la misma pregunta. Es tiempo ya de asumir nuestra resposabilidad y de no ignorar la respuesta que nosotros mismos nos hemos respondido tantas veces, es el momento de arriesgarnos y decir: !SOY YO EL UNICO QUE PUEDE PROVOCAR EL CAMBIO!
Hagámoslo a conciencia y reconozcamos que de esto depende mayormente nuestra FELICIDAD; millones en el mundo estamos sumergidos en lo mismo y muy pocos son los que se atreven a VIVIR a plenitud. Porque una vida plena es aquella que se vivió al máximo, que enfrentó sus retos, que luchó por sueños, que hizo lo que tenía que hacer para ser FELIZ.
Recuerda siempre: "Más vale un dia FELIZ, a toda una vida INFELIZ".
Un abrazo cibernético hasta donde te encuentres.
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